A partir del 21 de Abril de 2015, Google incorporo una nueva modalidad de penalización para aquellos sitios web que no cuenten con un diseño responsive. Los mismos se verán afectados por la nueva actualización de su algoritmo en el que los sitios web que no estén optimizados para dispositivos móviles perderán posicionamiento en los resultados de búsqueda de Google, lo cual repercutirá negativamente en el nivel de visibilidad y por consiguiente en la tasa de captación de tráfico orgánico.
Google ha reconocido oficialmente el diseño responsive como un factor clave en el posicionamiento SEO de las páginas web, su objetivo principal es ofrecer una mejor experiencia de usuario a través de la navegación web por medio de los dispositivos móviles, que los lleve a obtener los resultados más pertinentes y oportunos independientemente de si es un sitio web o una App.
Google justifica esta reciente medida en la necesidad de adaptar los algoritmos de su buscador a estos nuevos patrones de uso, facilitando así la búsqueda de contenido útil adaptado a móviles, además de la indexación de Apps.